El presidente de la Cámara del Comercio Automotor (CCA), Alberto
Príncipe, consideró que la reducción de la alícuota en la venta de autos
cero kilómetro nacionales "es una medida que indudablemente beneficiará
la actividad de las terminales radicadas en el país y dinamizará el
mercado de comercialización en general".
El empresario sostuvo que con esta medida el gobierno tiene "un muy
claro objetivo de proteger la industria nacional, y la medida me parece
buena, porque, además contribuye a clarificar, a ordenar la realidad del
mercado". "Va a haber una diferenciación entre los autos de fabricación
nacional y los importados", dijo.
El directivo sostuvo que la decisión del gobierno "acerca un poco la
realidad del mercado porque los precios de los autos siguieron
aumentando después de haberse fijado la base imponible 225.000 pesos y
muchos autos, que no son de alta gama, estaban impactados".
Sin embargo, para la consultora ACEBEB la medida tiene un aspecto
"negativo" ya que "genera incertidumbre, distorsiones entre las marcas y
podría afectar las relaciones comerciales con otros países, como
Brasil".
"El aumento quitará presión sobre unas 68 versiones (22 nacionales y 46
importadas) de gama media que se hallaban en riesgo de caer en el
impuesto, si no se actualizaban", evaluó el coordinador del Sector
Automotriz de ABECEB, Gonzalo Dalmasso.
Dalmasso agregó que la decisión "permitirá que algunas versiones full de
gama media, que hasta junio se hallaban gravadas, puedan quedar fuera
del alcance del impuesto y revitalizar sus ventas en el mercado
interno".
"La discriminación de los importados resulta poco conveniente en
términos de costos y beneficios potenciales porque no conllevaría
grandes beneficios para la industria nacional", afirmó y destacó que
"podría generar problemas legales a partir de la inclusión de la
discriminación por orígenes dentro de la Ley de Impuestos Internos e
incertidumbre en el mercado, distorsiones entre las distintas marcas que
tienen presencia productiva en el país y un antecedente que podría
afectar las relaciones comerciales de la Argentina con otros países",
resaltó.
La decisión del gobierno modifica los impuestos internos para autos y
sube la base mínima imponible de 195.500 a 225.00 pesos y baja la
alícuota del 30 al 10%. Los vehículos que tributaban una alícuota de 50%
bajan a 30%, y la base no imponible sube a 278.000 pesos en el caso de
automóviles, utilitarios y camiones nacionales.
Gestoria del Automotor
No hay comentarios:
Publicar un comentario